Director del Ramón Llull y embajador abren
ciclo catalano-balear
El director del Institut
Ramón Llull, Joan María Pujals, acompañado del embajador de España
en Alemania, José Rodríguez-Spiteri, abrió hoy el ciclo "El Pont Blau"
dedicado a la cultura de Cataluña y Baleares, que es el estreno en
el extranjero de esa institución, dedicada a la proyección de la lengua
catalana. La apertura de la exposición del pintor mallorquín Andreu
Terrades en la Kulturbrauerei berlinesa fue el primer acto del ciclo
que durante doce días ofrecerá una variada panorámica del arte, la
cultura, el cine y el teatro de Cataluña y Baleares.
"El Pont Blau es un reflejo del interés alemán por Cataluña y Baleares
en el ámbito turístico e industrial", dijo Pujals "pero también de
los vínculos históricos entre las culturas catalana y alemana".
Pujals se refirió a uno de los actos de ese ciclo como es la presentación
de una edición facsímil del primer diccionario germano-catalán que
data de 1502 y que evidencia esos vínculos históricos.
Rodríguez-Spiteri, que hace unos pocos días tomó posesión de su cargo,
abrió sus palabras inaugurales en lengua catalana, en el que fue además
su primer discurso como embajador en Alemania. "Estas son las primeras
palabras que me corresponde pronunciar en Alemania y me complace especialmente
que sea en ocasión de estas jornadas culturales", dijo el embajador
en catalán.
Rodríguez-Spiteri continuó después en castellano y luego en alemán
para decir que aún no había tenido tiempo de saborear la vitalidad
cultural de que hace gala Berlín, pero que el ciclo "El Pont Blau"
será una magnífica ocasión para tomarle el pulso a esta ciudad.
Finalmente, Damiá Pons, consejero de Educación y Cultura del gobierno
balear, destacó la importancia de Alemania para la labor de intercambio
cultural que tendrá el Institut Ramón Llull y recordó que en este
país hay 19 universidades donde se imparte la enseñanza del catalán.
Pons agradeció asimismo la colaboración prestada para la organización
de las jornadas por la embajada española y especialmente por el Instituto
Cervantes, y dijo que el Ramón Llull cumplirá para el catalán una
función semejante a la que lleva a cabo el Cervantes para la lengua
española.
El consejero había anunciado previamente que Berlín acogerá la primera
oficina en el extranjero del Ramón Llull, que en otras ciudades europeas
utilizará los servicios y logística del Cervantes. EFE